miércoles

Barco Ebrio No 3


CONTENIDO Barco Ebrio” No. 3

Sueños Nibelungos (Poesía)
“Cáliz de vinagre”
Elena Solórzano –México-

“Mundo amigo dividido”
Fernando Labastida –México-

“Black Sunday Blues”
Jorge A. Amaral –México-

“A una mujer sin nombre y un hombre sin mujer”
Hugo Plascencia –México-

“Persecución del aire”
Pablo A. Rojas Escobar –Chile-

“Muñeca cantarina”
Margenis Díaz –Venezuela-

Jácara y Patraña (Cuento Breve)
“Matías”
Germán Banega –Argentina-

“Meninas”
Selavy –España-

Visión Encinta (Voces Literarias)
“Neruda: Caída y refundamentación de un problema poético”
Pablo Rojas –Chile-

Ojos que no ven…. (Cine)
“Regresiones (The Jacket)” por Fernando Labastida

Invenciones Mundanas (De todo un poco)
“Greguerías (2da Parte)”
Alberto Llanes –México-

“Descubra el maravilloso mundo de la red”
Selavy –España-


Entre otras Cosas (Recomendación de Libros)
“El Cuaderno de Bruno” de Javier Herce

Terquedad Acústica (Música)
“Auriculares for export (Say no more)”
Fernando Villalba –Argentina-

Muriendo de Tiempo, ¿Libre? (Avisos y Anuncios de eventos)
Actividades Febrero 2006 “Museo de la Nación” Perú

“Gira Universitaria, Alejandro Neri” (Trova) México

Masoquismos
(Convocatorias)
“Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino 2006” (México)
“I Premio Internacional de Novela Negra” (España)


"Barco Ebrio a la Deriva"
Equipo Editorial

Dirección y Edición:
Fernando Labastida

Formación y Diseño:
Valentina Just
Paulo González

ConsejoEditorial:
Carlos Vico
Germán Banega
Juan Carlos Sanz
Sélavy
Pablo Rojas Escobar
Fernando Villalba

martes

Presentación



Francamente innegable es la obviedad de ciertas cosas, la naturaleza de lo común no miente, a caso sólo permite la distracción de lo esencial ante una mente inquieta y adusta: desde hoy nuestra más sincera felicitación a todos aquellos personajes que han demostrado tener más de tres dedos de frente y, cuya virtud más elocuente, ha sido descubrir que “Barco Ebrio….a la deriva” es una REVISTA con formato pobre y austero, algún hermano mexicano le llamó “hacer internet de lo más rudimentario”….¡Aplaudo su brillante lucidez!
Me apego básicamente a resaltar el contenido de la “oferta” y no pretendo crear conflictos que no miren más allá del intercambio de ideologías. En la carrera literaria y sus enseres, debe actuarse por encima de las discrepancias y el Grupo Latinoamericano de las Letras fue creado precisamente para intercambio de experiencias. Cada uno de los miembros se desempeña en su localidad en actividades relacionadas con el arte y la cultura, nuestros procesos creativos van más allá de la concurrencia en internet, tomamos entonces la idea de crear una revista electrónica, para completar nuestros procesos, no aspiramos a lamer el culo de la burocracia y la mafia literaria, cuyos mejores baluartes son apadrinados y beneficiados por recomendaciones. Mírese el caso específico de México, los concursos literarios organizados por la SOGEM, CONACULTA, las instituciones y ayuntamientos estatales, son sin duda grandes fraudes a favor de escritores que no acatan el flujo histórico y el proceso creativo en amparo evolutivo, no hay vanguardia publicada, no hay subversión, no hay autenticidad y mucho menos jurados capacitados para trasgredir las políticas mafiosas. Infinidad de autores desfilamos en busca de oportunidades y, si bien es cierto que las oportunidades se dan a quien las busca y las merece, no es una realidad tener gobiernos que den becas, que creen fideicomisos para apoyar a los grupos en la búsqueda de aportar su grano de arena y en cambio, ocurre que escritores de la talla de Carlos Fuentes o Carlos Monsivais, son pensionados y becados de por vida.
“Barco Ebrio….a la deriva” ensaya en sus primeros números la posibilidad de crear algo digno, una propuesta estética más viable para la navegación y un fin informativo trascendente, donde el desembolso económico será inminente y pagado con agrado. Punto y a parte.

Tomando entonces a bien la facultad que otorga el poder de comunicar y compartir la noble experiencia literaria, zarpamos mar adentro la travesía del 3er número sin escatimar recursos, deseosos de hallar más fuerza en el trayecto, exhortando a la comunidad lectora a fomentar el “Espíritu Literario” mediante críticas y comentarios que duelan tanto como en la guerra, pero que no busquen lo mediático, lo viperino ni lo obvio, sino que se sirvan de la palabra (con toda la responsabilidad que ello implica) para orillar a nuestros autores y colaboradores, al análisis y la autocrítica y, por ende, a buscar la mejoría en sus trabajos. Para ello hemos ofrecido nuestro correo electrónico –que ha sido lo más recurrido- o bien, al final de cada sección tenemos la herramienta para hacer públicos los mensajes a los autores o al Consejo Editorial. En breve, pondremos a su disposición un foro exclusivo para estos fines.


Fernando Labastida
Director Editorial


Sueños Nibelungos (Poesía)


Cáliz de vinagre

I
Beligerantes uniformes buscan en todos los resquicios,
derriban las efigies consagradas.
En el delirio de la mariguana
el invasor vislumbró secretas armas.

Hurgan en los templos los marines,
retrocede “El libro de los salmos”.
En Bagdad el cielo arde cada noche.
Gimen las madres, temen por sus hijos.

De las cavernas salen alacranes.
vaho de muerte en todos los rincones.

Con un tornado en las pupilas
un padre acuna el cadáver de su niña.

Los muñones aún no cicatrizan
y las piernas mecánicas
no sirven para seguir las huellas de la paz.

II
Por las noches miro las noticias
y lloro de horror y de impotencia.
No quiero participar en esta guerra,
pero se instala en el centro de mi casa.

En los patios asoman escorpiones.

Si el verde gorjeara siempre en las campiñas,
si el agua de los ríos regresara con los duendes,
si el hombre trepidara con los salmos,
tanto dolor no floreciera.
Si con zumo de almendra
impregnáramos la tierra,
negros, blancos y amarillos
comulgarían con semillas de amaranto.

III
Un buitre mi lecho merodea,
gotea sangre y deteriora
la albura de las sábanas.
Un hombre le vacía los ojos a un anciano.
Me cubro con las mantas,
la misma visión me paraliza.
Mi lengua es de fuego y no se mueve.
Flexiono las piernas,
vuelvo a ser el feto en su placenta.

IV
(Abismo agusanado,
infierno donde danzan ojos.
Presagio de eclipses, deleite de vinagre).

V
La bruma se agazapa, el aire se congela.
Las campanas gimen por los muertos.
Banquete de larvas, la carroña.
Los buitres vuelan en círculos perfectos
(sus plumas, navajas de obsidiana).

VI
El turbante, tinto en néctar de pitahaya.
Las entrañas, serpentinas fuera de su vientre.
Allí está coronado de magnolias.
Un ojo cuelga de la cara.
Latir metálico, sonoro,
el corazón del hombre
recibe la muerte dignamente.

VII
Estalla la violencia,
fragmentos de espejo clausuran la mirada.
Las almas buscan un hilo ascensor
que las conduzca a otro espacio
de dátiles y mirra.
Hambre de justicia, el maná no llueve.

VIII
Sobre los escombros de su pueblo,
un rey sestea en lecho de diamantes.
En la mesa,
codornices rellenas de perlas y corales.
Con daga de plata a la paloma hiere,
disfruta su carne blanda y dulce.
En la puerta de palacio se deshace
en saliva la boca del mendigo.

IX
Devoto corta dedos, manos.
Teje la sangre augurios de lignito.
Cuervos de azabache merodean
el “Jardín de las sentencias”.
Robo de mendrugos, vinagre en las entrañas.
El oro está en su casa y no es de él.
Mutilación, robo de mendrugos.
En el desierto sucumben corazones.
Vinagre en las entrañas.
Dios duerme.

X
Derrumban la efigie del tirano,
los pájaros picotean sus muslos,
en cada mano agua venenosa.
Los reptiles enroscan en su cuello.
Ahora, en una cueva, convive con las ratas.

XI
Los prisioneros, columnas tarumbeantes.
Una mujer soldado coloca en el cuello
de un hombre el collar de los oprobios,
juguetea con él y lo monta como si fuera galgo.
Los soldados de academia desnudan prisioneros,
les palpan los testículos, los masturban,
los ungen con el semen…
En las noches a los centauros jinetean.
Con esas manos acarician el rostro de sus hijos.

XII
Huérfanos de luz, los niños.
En la puerta cuelgan mantos en jirones.
Los gusanos desmigajan el cuerpo de la madre.
En La Media Luna ondea otra bandera.
Victoria significa: total exterminio en el desierto.

©Elena Solórzano –México-



Mundo amigo dividido

Tengo manía de caer donde el suelo me reclama
En la calle y el rostro del semáforo rojo
Sobre polvo en retinas, valle tuerto
Banqueta donde orinan los perros
Vagabundos que buscan sueños en botes de basura;
Algo como pocos hombres
La fortuna del árbol que cae ante el concreto
El paso del hombre que conquista territorios
¡Maldito trozo de barro!
Ciudad de todas las ciudades
Mundo en dos mundos dividido
Cuerpo incompleto
Ave que dejas alas para iniciar rumbo al abismo
Sin alguien a quien llamar cuando la tristeza avanza
Cerca de los días nublados
De las melodías que amarran pies al ojo noctámbulo
Rebelión sin causa
Entrañablemente degradado a la calidad de nadie
Y todo por ella
Madre ensoñada cálida diminuta
Suerte de no dejarla aquí
Metida en esta caja de dinero
Para ahorrarme su presencia
No disfrutarla
Como se disfruta el pan en barrio de hambrientos
¡¡¡Migajas torpes!!!
Yagas en brazos del fuego
Porque somos fuego abierto al frío
Manos que se juntan en la sombra de los atropellados
Ojos incrustados en la carne del aborto
Pieles púrpura teñidas desteñidas
Cielos derrumbados por la pedrada del niño
Patrias que abren desde nunca
Hasta el ópalo solsticio

Luna amiga puta barata
Ebria libertina que sometes mareas
Los océanos no te pertenecen
Ni los nidos en las cloacas
Ni la tinta de ésta pluma

Si es ciudad se sabe todo
El amigo se marcha
El amor llega muy tarde
La del departamento ocho es amante
del esposo de Esperanza
Casualidades
Vanas teorías las del llanto
Crédulos estamos divorciados
Unos de otros para nosotros mismos

Sí ciudad, me anegas
Me llenas de inmundicia
De ganas de llegar a tiempo
Pero me acuerdo del ardor de la llegada
Cuando los polos se juntaron como pestañas
Y todo el tiempo hubo hambre
¡¡Vamos mundo Biblia acorazado!!
Nadie creyó lo de Eva
Como prueba mi dislexia
Tímpano roído por inmaculada señora
Horizonte pálido
De tiniebla gárgola su monumento
Es sueño
Semáforo escarlata rutilando sangre
¡¡No, no es la huella de éste camino!!
Es del otro lado de la acera
Aquí mueren los pobres
Y allá
Mueren el resto
Mundo amigo dividido

©Fernando Labastida –México-


Black Sunday Blues

Levantarse un domingo,
Andar con los músculos magullados
Y una cornada bajo el brazo
Mientras decenas de ángeles
Me muestran la belleza:
El gran arcano vedado
A los proscritos del Infierno.

Levantarse un domingo
Y andar dieciocho horas
Con la dureza de la cama a cuestas;
No escribir, no hablar,
No tener fuerzas para romper la maldición
Que me obliga a guardar silencio.

Levantarse un domingo negro
Y dejar que todo pase
Hasta que mi estela de humo
Se disipe al anochecer.

©Jorge A. Amaral –México-


A una mujer sin nombre
y un hombre sin mujer

Tocando el piano sobre un sillón de mimbre
desnuda al borde de la mirada
tus pechos polifónicos de leche
son partitura del día que divide en dos la noche

Mis ojos te contemplan,
ahogan la visión en tus muslos
como lo hace el ciego ciegamente.
Se dilata la razón,
se desgarra el pecho,
un tirón en la pupila
me deja afónico de palpitaciones.
Se desata la masacre
de una guerra termo-hormonal

Tus labios son culpables
del desequilibrio de las estaciones
frondas de verano llenos de abril
donde el invierno se olvida
(aún eso lo sé sin conocerte)
¡anda a saber por qué!
pero lacera lo que pudimos haber hecho
¾ hay que desnudarnos de tanta nostalgia ¾
cuando un hombre ama a una mujer
sobre la raíz de la tierra nace la mandrágora
oculta e insólita como un poema
en el puño de la bolsa
que cada viernes se estruja en el mismo bar.

Con el aliento mutilado en la epidermis
seguí tu espalda en mi pecho ronco de fracaso
que imploraba violaras mi tumba
de la tristeza que da no saber tu nombre
y viceversa.

©Hugo Plascencia –México-


Persecución del aire

Tus palabras se visten con un luto riguroso
hipócritas sonríen
sonríen en la mesa.
Hay en ellas soledades
cementerios submarinos,
ironías similares a las acrobacias de la muerte.
Tus palabras se me arrojan en bandadas,
en círculos de fuego cual si fueran
la incertidumbre del jazz.
Eléctricas caen en recta irrefrenable,
vectores en noche abierta dando saltos de furor.
Se dispersan, tus palabras,
como aguas misteriosas
llenas de sombrío colorido
y sospechosa reputación.
Conversan entre ellas
como si algo objetaran del poema,
estos los ojos que cruzan el cuerpo inmaterial.
Algo traman, lo sospecho, tus palabras.
Algo ocultan tras el negro resplandor que las define.
Un secreto
como un tiempo embotellado,
un mensaje que aparece discurrido
y parloteado como nuevo leit motiv.
Tus palabras se levantan belicosas en el sueño,
una noche se aparecen con cuchillos a mi cama.

Hipócritas sonríen en la mesa.
Soledades las definen.
Tus palabras interpretan tus palabras.
Su respiración circunda
el centro gravitacional que las dispersa.
Son vectores que se quitan el sombrero,
en bandadas interrumpen la comida.
Me interrogan, tus palabras,
entre páginas ardientes.
Dando giros me atraviesan
y no entiendo lo que digo.
Me sujetan con cadenas al poema,
me destierran del secreto que poseen.
Algo traman, tus palabras, lo sospecho.
Conversan entre ellas,
se ríen a mi espalda
no lo logro comprender.
Tus palabras me persiguen en la fuga de mi sueño,
una noche se aparecen con cuchillos a mi cama.
Se cuelgan a las notas que libera mi garganta,
se visten, tus palabras, con un luto riguroso.
Parecieran moscardones habitando mi osamenta
Bailando con la muerte como locas se emborrachan.

Tus palabras me persiguen como un viejo leit motiv,
auscultan mis visiones desde el fondo de mí mismo.
Me duermen entre cantos
con nostalgia y alegría.
No comprendo lo que dicen
esta noche tus palabras,
Me parecen cementerios levantándose en el verso.
Algo piensan, tus palabras, me aseguro,
se disfrazan de verdugos en el circo que me inventan.
¿Algo quieren?, me pregunto
Y me azotan con cadenas mientras busco.
Quieren sexo, me responden
y entre ellas se fornican con completa perversión.
Se descuelgan tus palabras del racimo de la noche,
se aparecen decididas con cuchillos a mi cama.
Se me arrojan en bandadas como en fuga presurosa,
me arrinconan al poema donde ejercen su violencia.
Me atosigan tus palabras,
se me pegan en el cuerpo y ya me saben a la muerte.
Me emborrachan tus palabras
y no paro de pedirles que regresen
que regresen para mí.

©Pablo A. Rojas Escobar – Chile-


Muñeca Cantarina

Columpiada y extendida
comiendo en mis pies se derrama
una fe que ha nacido torcida
Y más que ayer se extiende
y brinca con su copa fálica
entre piernas que anidan
las hemorroides vespertinas
de ese tiempo.

Que se enturbia en cada esquina
y como muñeca cantarina
viene y hace cacas
dentro de una cantina
derramando sudores
recogiendo sus faldas
Se sienta en medio del sol
para morirse en mi espina.

©Margenis Díaz –Venezuela-

Jácara y Patraña (cuento)

Matías

Matías era un buen periodista. La verdad, es que su trabajo era estupendo, obtenía las mejores instantáneas allí donde sólo llegaban los más osados. Lo llamaban "el fotógrafo de la guerra". Sin embargo, para mi gusto, había realizado mejores trabajos de filmación y entrevista.
Trabajaba para un informativo televisado y un importante periódico, también escribía para una revista de actualidad.
Era de esperar que cuando Estados Unidos declarara la maldita guerra a Irak él estaría allí y así fue, incluso antes de que sea oficial la noticia. Claro que mucho antes de viajar, cuando los rumores periodísticos confirmaron la amenaza, preparó algunos asuntos. Aún estoy asombrado, previno mucho más allá de lo que puedo explicarme.

Esa noche -porque eligió una noche para decírmelo- me sirvió un whisky y se sentó a cenar un sándwich conmigo, yo sabía que pasaba algo –soy su padre, puedo notarlo-.
-Me voy a Irak- dijo. Recuerdo que discutimos, siempre lo hacíamos cuando no estábamos de acuerdo, pero sabía, como siempre, que terminaría haciendo lo que quisiera.
Esa noche intenté lo que nunca. -Qué dirá tu madre-, le dije. Y gracias a ese comentario nuestra discusión se prolongó unas horas y en su enfado llegó a decirme que fue culpa mía la separación. En fin, eso me molestó tanto que ésta vez me negué a intervenir, -se lo dirás tú- le grité, además así me ahorraría las "agradables apreciaciones" sobre mí, que suele hacer mi ex mujer.
Pasaron unos días y se calmaron las cosas, me dijo que viajaría en una semana, y yo para valerme de algo reincidí con lo de aquella noche. –¿Ya se lo has dicho a tu madre? ¿Qué te dijo?-.
-¿Qué me va a decir?- Contestó un poco molesto -Me voy a una guerra papá. ¿Qué esperas que me diga? Lloró todo el día. Incluso cada vez que me llama.
Yo sabía que algo así sucedería y con ello tenía la lejana esperanza de que desistiera.

Un día antes del viaje, me entregó doce cartas. Fue uno de los momento más desgarradores de mi vida. Nunca antes mi hijo me vio llorar, en cambio en ese no pude articular ni una palabra.
Me entregó doce cartas y me pidió que las fuera enviando una por mes. Las cartas eran para Marta, mi ex mujer, su madre. Me dijo que en cuanto pudiera me enviaría una a mí -No tardará más de cinco meses, lo prometo-. Ambos sabemos cómo es Marta, si no das señales de vida a cada rato, se vuelve loca y vuelve loco a todos, aunque simplemente fueras de acampada al jardín de casa.
A pesar de todo, lo de las cartas me parecía una buena idea, nunca se sabe si una carta llegará a destino y Marta con todo esto de la guerra... sería imposible.
Pasaron tres meses y por supuesto que leía toda la información que llegaba a mis manos referida a la guerra. Pero tampoco quería obsesionarme, porque a veces era peligroso pensar en ello: las imágenes más terribles no paran de aparecer en tu mente, las noticias te llevan a relacionarlas con tu hijo constantemente, que si los bombardeos, las minas, las guerrillas, los secuestros, los degollados, en fin, no es necesario describir las atrocidades habituales que se practican en una guerra.
Días antes de enviar la cuarta carta destinada a Marta, un informativo comunicó el atroz bombardeo aéreo que sufrió la ciudad de Basora –cuidad en la que mi hijo dijo que se alojaría mientras estuviera allí-. Rompí a llorar como un desesperado, llamé por teléfono a Marta, ella también vio la noticia, lloramos juntos por teléfono y entre sollozos, llantos y prolongados silencios estuvimos una hora y media –desde el divorcio, hacía varios años, que no llamaba a mi mujer.
Colgué el teléfono cuando me hube desahogado, nada estaba dicho oficialmente pero era inevitable pensar que algo malo había sucedido. Luego recuerdo que me dormí profundamente y desahuciado.
Al día siguiente cuando miraba las noticias, un poco recuperado de ánimos, vi sobre la mesa la cuarta carta que mi hijo había escrito para su madre. Sin pensarlo un instante, la cogí y salí. Me guiaba una fuerza extraña, poderosa que me arrastraba a entregarla al correo sin pensar en nada. Con la mente absolutamente secuestrada y en blanco. Cuando la entregué sentí que algo abandonaba mi cuerpo y me dejaba deshecho nuevamente, era como si todas mis fuerzas se hubieran acumulado para llevar la carta al correo, pero luego me invadió el pánico. No sabía lo que había hecho ni por qué. Lo que era seguro es que Marta creería que nuestro hijo aún vivía. Supongo que la fuerza de la fe y el mismísimo amor fueron los que me impulsaron (y me impulsarían a enviar hasta la última carta, transcurridos los doce meses).
Para mi sorpresa, el sexto mes después de enviar la secta carta, recibí una de mi queridísimo hijo, fechada cuarenta días después del bombardeo.


Hola Papá.
En estos difíciles meses, los recuerdos de mi niñez me han visitado a menudo, tú eres gran parte de esa niñez, tú eres gran parte de mis mejores recuerdos. A veces te hecho tanto de menos...
Sé que te estás ocupando de enviar los sobres a mamá. Saber que ella no se preocupa por mí y que está bien me ayuda a continuar y a mantenerme alerta, no sé si podría hacerlo de otra manera.
Con respecto a mi trabajo, como sabrás, es muy duro, pero fundamental, si supieras... estarías orgulloso de mí.
Espero que esta carta te lleve toda mi presencia, la tuya la tengo día a día conmigo, a mi lado, aún más en las complicadas situaciones. Bueno, no hablemos de esto, quiero decirte también que a cualquier mensaje o carta, antes de llegar a destino, las abren en los recintos de inteligencia y las controlan (para que no existan mensajes escritos en clave o información que ayude a los contrarios) y luego, una vez verificadas las envían a sus verdaderos destinos (la dirección que figura en los sobres nunca corresponderá con la mía, son medidas de seguridad) Y otra cosa, no me alojo en un mismo, tengo que moverme según convenga, y estos cambios los hacemos de manera imprevisible, ya sabes.
No olvides que sé moverme en estos lugares.

Te dejo un abrazo y no te preocupes por nada, estoy bien.
Te quiero con toda el alma y te llevo conmigo.
Hasta la próxima carta.

PD: sigue enviando a mamá las cartas que te dejé porque no sé si podré escribirle a ella también, por las dudas... tú ya sabes.


Bueno, intentar explicar lo que sentí cuando recibí esta carta es imposible, lo que más se acerca a ese sentimiento fue el día en que Marta lo trajo al mundo, lo pusieron en mis brazos y lloró por primera vez, así... con su miradita perdida y sus ojos transparentes, su cuerpito delicado moviéndose levemente, sus cabellos suaves...
Llamé urgentemente a Marta para compartir la noticia de que nuestro hijo estaba vivo, que de verdad estaba vivo, pero por supuesto no le dije nada, simplemente hablamos de cuándo terminaría todo y yo estaba eufórico y ella tan tranquila, con la tranquilidad que yo le daba, si pudiera decirle que de verdad estaba vivo, que ahora sí que estaba bien y no antes, pero era mejor así, al fin y al cabo la conclusión era la misma.
Desde allí supe que todo iría bien, que los días sucederían y que en cualquier momento mi hijo llegaría a casa. La guerra ya no era noticia, más bien estaban las pequeñas guerrillas pero eso ya no era un peligro, mi hijo en Colombia había estado en peores situaciones y las conocía perfectamente.
Yo continué enviando las cartas, la de noviembre, diciembre, enero y febrero, pero después de entregar la novena carta, recibí la segunda carta de mi hijo:


Hola papá
.
Llegada esta instancia, me veo en la obligación de darte este mensaje aunque hubiera preferido que sea en persona, pero es imposible. Nunca creí que llegaría éste momento, quiero decir, que no creí que sucedería pero igualmente estoy preparado. Esta es la segunda carta que te envío, y la última por el momento, pero no te alarmes. Los hijos somos hijos de la vida, como decías.
En éste tiempo me han sucedido cosas fantásticas, estoy encontrando cosas maravillosas para mi vida personal, ya sé que el lugar no es el mejor, el más adecuado, pero también sé que nunca se sabe dónde encontrarás lo que necesitas, pero bueno. Esta carta será un poquito triste por la decisión. Sé que lo entenderás (siempre lo has hecho).
Parece extraño que de todo esto me diera cuenta aquí, en plena guerra, pero creo que es el sitio justo, las cosas siempre llegan cuando tienen que llegar.
La decisión que tomé, es que me voy, que no volveré, que desde aquí mismo me voy al mundo a establecerme en algún remoto lugar, desde donde te escribiré pasados algunos años, los suficientes como para sentirme realmente independiente conmigo mismo (encontré una fabulosa mujer, ya la conocerás).
Esta, la escribí con lágrimas, me hubiera encantado que sea de otra manera, pero no hay vuelta atrás, ya me conoces, nunca desisto una vez empezado. Bueno, ya basta de hablar de esto, te comento también que mi trabajo va perfectamente, ya sabes que no tendré problemas en ninguna parte del mundo puesto que el periodismo no tiene nacionalidad, como siempre dije. Por ese lado no hay inconvenientes.
Podría escribirte hojas enteras en esta despedida, pero no. Y aunque me cuesta tanto esto, no quiero irme sin decirte que es un placer ser tu hijo, eres genial.

Te quiero con toda el alma y te llevaré por siempre conmigo. Adiós Papá.

PD: por favor, envía las cartas que faltan a mamá, luego le escribiré una al final, para despedirme también, tú no te preocupes por ello.

Tu hijo: Matías.


Mis sentimientos se movían entre la felicidad y la tristeza, mi hijo ya había crecido y se largaba al mundo, era todo un hombre, un gran hombre. Y por otra parte seguía siendo mí hijo. Era extraño la paz general que sentía en mis carnes, en mi piel, en mi corazón. Aceptaba con toda el alma la decisión y con un poco de nostálgica felicidad.
Entregué la décima al correo, la undécima y la última carta, la carta número doce. Pero días antes de entregarla, había decidido abrirla y leerla. No sé, creo que por simple curiosidad y por asegurarme de que los datos no están muy desencajados con lo que había ocurrido hasta el momento en Irak.
Cuando la tuve en mis manos a punto de abrirla un escalofrío me recorrió el cuerpo, la carta decía así:

Hola mamá.
Llegada esta instancia, me veo en la obligación de darte este mensaje aunque hubiera preferido que sea en persona, pero es imposible. Nunca creí que llegaría este momento, quiero decir, que no creí que sucedería pero igualmente estoy preparado. Esta es la carta número doce que te envío, y la última por el momento, pero no te alarmes, los hijos somos hijos de la vida. ¿Recuerdas?.
Te cuanto que en éste tiempo me han sucedido cosas fantásticas, he encontrado cosas maravillosas para mi vida personal (incluso me he enamorado). Ya sé que el lugar no es el mejor ni el más adecuado, pero así son las cosas. Esta carta será un poquito triste por la decisión. Te pido por lo que más quieras que lo entiendas. El río, debe dejar de ser río, para ser eterna e infinitamente mar.
Parece extraño que de todo esto me diera cuenta aquí, en plena guerra, pero ha sido el sitio justo, las cosas siempre llegan cuando tienen que llegar.
La decisión que tomé, es que me voy, que no volveré, que desde aquí mismo me voy al mundo a establecerme en algún remoto lugar, desde donde te escribiré pasados algunos años, los suficientes como para sentirme realmente independiente conmigo mismo. (Me cuidará mi mujer, ya te enviaré alguna foto, te encantará).
Esta, la escribí con lágrimas, me hubiera gustado que sea de otra manera, pero no hay vuelta atrás, ya me conoces, nunca desisto una vez empezado. Bueno, ya basta de hablar de esto, te comento también que mi trabajo va perfectamente, ya sabes que no tendré problemas en ninguna parte del mundo puesto que el periodismo no tiene nacionalidad, como siempre dije, por ese lado no hay de qué preocuparse.
Podría escribirte hojas enteras por esta despedida, pero no. Y aunque me cuesta tanto esto, no quiero despedirme sin decirte que eres maravillosa mamá, siempre lo has sido, tengo tanto que agradecerte.

Te quiero con toda el alma y te llevaré por siempre conmigo. Adiós.

Tu hijo: Matías.

Terminé de leerla con la mano en el pecho sosteniéndome el corazón.
Cuando salí del hospital, ya recuperado -me diagnosticaron un preinfarto- volví a casa. Hice una copia de la carta, la cerré y la entregué al correo.
Imagino la gran sonrisa de su madre al recibir una carta de su querido hijo Matías.
Germám Banega -Argentina-





Meninas


Sr. Rodero, pintor y decano en funciones de la universidad de bellas artes de Calodia, distinguido profesor de asignaturas referidas al color en diversos cursos, tenía la peculiaridad de ceder al vómito, más la dudosa fortuna de que el deshecho, una vez derramado, pasara a extenderse leve y ligero sobre la superficie en que caía hasta dejar inmortalizada la perfecta representación de una Menina.
En cierta ocasión, consabido de la dádiva, procedió a tenderse a mano un lienzo sobre el cual dar fe del extraño suceso, que había ya visto en un par de ocasiones desteñirse en la cisterna de su cuarto de baño.
Trasegó pues el lienzo con sí, salvo en las noches, en que lo dejaba a pie de alfombra, junto a la cama.
Y así llegó, días después, el momento en que le sobrevino el síntoma, con la mala ventura de despertarle en golpe de sueño hondo y, la probabilidad de acertar en el lienzo, en exceso reducida de tan súbito el efecto. Así pues quedó entre las sábanas rodeado de las dichas; tal que hubo de adoptar postura incómoda para no hacer roce, a sabiendas de lo sañudo del contacto dérmico con la muerta pintura.

©Selavy –España-

Visión Encinta (Voces Literarias)



“Neruda: caída y refundamentación
de un problema poético”
Por Pablo Rojas E.

La trayectoria, o el viaje de la poesía de Neruda, puede ser comprendida, con un consenso bastante general entre sus críticos, en términos de una caída y una posterior fundamentación. Caída angustiante, filosófica, epocal, que pasa de las fiestas del amor de su primer Crepusculario, se desarrolla de manera problemática para algunos y deslumbrante para muchos en los Veinte poemas de amor y una canción desesperada, para desembocar luego en el libro más estremecedor que conoció la producción monumental del poeta, Residencia en la tierra. Este último es sin duda el texto más admirado de Neruda, no tanto por la crítica, muchas veces ciega a la hora de elevar el verdadero texto literario e igualando este con aquel con un simple método de lectura, sino por los propios poetas que han sabido ver en Residencia en la tierra no tan sólo un manantial de imágenes informes superpuestas a modo de colage desorganizado, sino la crisis estética, filosófica y moral de un continente y de una sociedad históricamente atravesada por una crisis política de magnitudes totales. Es tema recurrente en la extensa bibliografía Nerudiana, hablar de cierto “giro” que se produce a partir de la tercera residencia. Libro crucial no sólo en la historia de Neruda, sino en la historia de la poesía hispanoamericana.

Para la fecha de esta Tercera Residencia, el joven poeta del Crepusculario se ha hecho ya un hombre de mundo. Ha dejado un pueblo lluvioso al sur de Chile, ha dejado posteriormente su país para sumergirse desde un rincón perdido del Asia en la angustia espesa de las primeras Residencias, y se encuentra en fin, de cónsul, en un país como España quien le mostró y le brindó la cordial amistad de grandes figuras de la generación del 27 como lo fueron, Rafael Alberti, Federico García Lorca, Miguel Hernández, y las enemistades respectivas de Juan Ramón Jimenez y Juan Larrea. Pero sin duda, la experiencia que marca definitivamente el curso de su poesía, será La Guerra Civil Española. El poeta de ahora en adelante no se permitirá más una cavilación ideológica, la duda existencial no tendrá más lugar en su poesía. La revolución, el materialismo histórico más precisamente, ocuparán desde ahora el principal apoyo filosófico moral en la construcción de la nueva poesía.

Ese proyecto a veces algo extraño del Canto general nace justamente por mezclar una visión histórica latinoamericana con un compromiso político que vaya más allá de un sujeto que duda, que padece la angustia, que carece de certidumbres. Se trata de oponer a la angustia, a la duda, la certeza de una visión histórica que tiene una repercusión en el ahora, en el problema político propio de una América mestiza. Alturas de Macchu Picchu nos muestra un pasado, un tiempo anterior no ajeno a las contradicciones de clase. Neruda quiere hablar por los oprimidos, por los marginados, pero para eso invoca las fuerzas sepultadas de una América olvidada tras la conquista. Desde Canto General la poesía de Neruda no volverá a ser más simple juego del poeta con la palabra. No habrá más arte por el simple lujo del arte. Desde ahora la poesía es compromiso político, es arma de una revolución total, y es incluso la fundadora de esta nueva revolución.

No nos parece equivocado plantear la problemática de la poesía Nerudiana como una problemática propiamente metafísica. La poesía primera de Neruda nace desde un idealismo contemplativo cuyo principal conflicto es la presencia material de un cuerpo negado o en contradicción con los modelos ideales hasta entonces legitimados por cierta literatura preciosista de la cual han bebido innumerables poetas, rebelión del poeta que llega a su desintegración (dispersión del “yo” en un “tú” indefinido) en los Veinte poemas de amor y una canción desesperada. La caída que señalamos se produce precisamente en este punto. La contradicción entre el cuerpo y el alma es algo que el poeta no sabe barajar. El idealismo se le presenta igualmente válido que su realidad material. Textos que van desde El hondero entusiasta hasta Residencia en la Tierra, muestran esta caída en la incertidumbre, digámoslo de una vez, en el nihilismo que consume a una época decadente incapaz de establecer valores propios y afirmativos. Sin embargo esta caída, es para Neruda, y para el destino de su poesía, un tocar fondo que le permite dar cuenta de una necesaria reconversión, de una refundación total del mundo en valores que sean capaces de afirmar el valor de la vida en un contexto de lucha política. Como decíamos, el materialismo histórico, el compromiso político de Neruda y lo que sería posteriormente su activa participación en el partido comunista.

Sin embargo, pensamos, no se puede confundir el materialismo de Neruda con una visión puramente económica, científica, de una realidad política determinada históricamente. Nada más alejado al verdadero habitar poético de una palabra que no sólo ha sido cuidada por el poeta, sino que además por ser una palabra vigilante, es ella quién cuida, quien dirige el mundo desplegado en la palabra. Este materialismo poético, no es una visión científica del mundo, es una visión política que tiene su fundamentación en una doctrina científica, pero que estructurada o reelaborada por la palabra poética, adquiere dimensiones fundacionales. El compromiso político de la palabra nerudiana es de carácter fundador. De ahí la sencillez de las Odas elementales, odas destinadas ya no al poeta en su torre de marfil, sino al hombre de la calle común y silvestre. La palabra de Neruda, desde las Odas, habitará el mundo poéticamente, anulará la contradicción presente en el idealismo, anulará la incertidumbre de los valores, para realzar un aquí y un ahora concretos. Su poesía alcanza aquí una universalidad peligrosa.

Discutido por muchos ha sido el Neruda de la política, aquel del “Canto de amor a Stalingrado” aquel de Incitación al Nixonicidio y alabanza de la revolución chilena. Para muchos el poeta de Residencia en la Tierra se pierde de horizonte poético y está más próximo al panfleto que a la verdadera poesía. Lo cierto es que una escritura tan basta como la Neruda debe ser leída, como proponíamos anteriormente, como un viaje donde existen dos momentos cruciales en la construcción del mundo poético que se habita, la caída en la angustia existencial de una época, y la refundamentación de un mundo despedazado bajo los valores de un materialismo poético con caracteres de una reivindicación política de magnitudes totales.
Cabe preguntarse hoy en día, viajando nuevamente por el trayecto de la poesía nerudiana, viajando por una problemática histórica que no nos es lejana. ¿Fue la solución adecuada la propuesta por Neruda? Es decir ¿Fue su materialismo poético una salida verdadera para el nihilismo (hoy cada vez mayor) de una América mestiza? ¿Es la poesía de Neruda una afirmación válida hoy para pensar un mundo en crisis? Probablemente textos como Alturas de Macchu Picchu estén hoy, a medio siglo ya de distancia, más vigentes que sus textos más comprometidamente políticos. No por el evidente desprestigio que ha tenido el marxismo desde hace treinta años, sino por la mixtura histórico cultural que define a cabalidad nuestra problemática latinoamericana. Piedra fundamental la establecida por el vate de la ciudad de las piedras escalares y por lo cual nos parece más que lamentable la pobre reducción que de él suele hacerse al encasillarle como el poeta sentimental de los adolescentes enamorados.

Ojos que no ven (Cine)


Regresiones (The Jacket)
Por Fernando Labastida
Imaginemos que un buen día se nos presenta la oportunidad de viajar a través del tiempo, que se nos concede la fortuna (o quizá el dolor inmenso) de averiguar que será de nuestra vida en 20 años (por decir un número al azar) o bien, regresar al pasado y buscar el origen de ciertas cosas que la memoria, caprichosa y juguetona, no tiene a bien como un recuerdo lúcido. Tema recurrente, cierto, que muchos cineastas han adoptado para exponer sus teorías o simplemente divagar en torno al onírico concepto de “tiempo”.
Relativo es el espectro, una gama de teoremas nos invaden e invitan a suponer que no es plano el movimiento en torno al mundo, que la cuadratura metafísica tiene bajo manga su mejor carta. Así se nos presenta “Regresiones” (The Jacket) dirigida por John Maybury y protagonizada por el genial Adrien Brody (El pianista, donde fue dirigido por Roland Polanski), y nos ofrece una actuación impecable, que si bien no es una gran obra de arte, si cumple cabalmente con el recurso de la motivación a la reflexión y puede llegar a convertirse en película de culto para los adoradores del cine gótico.

Jack Starks (Adrien Brody) soldado de la guerra del Golfo Pérsico, es herido letalmente por un tiro en la cabeza (escena que, de una manera violenta, abre la trama de la película). Declarado muerto, es rescatado por la buena conciencia de una doctora que impide que figure en la lista de muertos y regresa a su natal Vermont diagnosticado con daño irreversible en la memoria. La situación se vuelve sumamente trágica para él porque camino a casa y después de ayudar a la que, a posteriori, será la co-artífice de su lucha, Jackie (Keira Knightley), es acusado de haber asesinado a un policía, siendo recluido en un hospital psiquiátrico bajo la custodia del doctor Thomas Becker (Kris Kristofferson) quien lo somete a un tratamiento con “drogas experimentales”, encerrándolo por largos periodos de tiempo en el depósito de cadáveres ubicado en el sótano e inmovilizándolo con camisa de fuerza.

La mente de Starks, drogada y desorientada, inicialmente tiene destellos de la guerra y del asesinato del policía, después lo transporta al futuro donde, fuera de un restaurante en Vermont, conoce a Jackie, una mesera que se apiada de él e intenta ayudarlo a encontrar lugar para pasar la noche. Es nochebuena y todos los refugios para indigentes están llenos, así que Jackie deja que duerma en su sillón.
Bajo dichas circunstancias, Starks descubre que está sentenciado a morir en cuatro días. Juntos, buscan la manera de salvarlo de su trágico destino.

Película que nos muestra dos brechas importantes, la interminable y relativa pregunta de la existencia y el tiempo, y de una manera cruda (desde la óptica del paciente) la vileza de los procesos “curativos” aplicados a las llamadas “mentes enfermas o dañadas”. Una trama narrada desde una carta, una vida que lucha desde el infierno y que bien, puede ser un día que ya ha pasado o que puede venir al recuerdo de una imagen futura.
Y lo obvio, el trasfondo que insinúa John Maybury, aquello que nunca hicimos, aquello que en apariencia no fue trascendental en el pasado, puede mañana, sumergirnos en el desastroso mundo de las consecuencias y los fantasmas…

País de Origen: Estados Unidos/Reino Unido/AlemaniaIdioma: Inglés Año: 2005
Hay que resaltar la fotografía de la película, destacable de principio a fin.

Invenciones Mundanas (De todo un poco)

Greguerías (2da Parte)


La persona obesa trae una botarga integrada

El borracho que huele a alcohol, se ha roseado la botella del perfume para una cita de trabajo

Cuando un toro coge a un torero no practican zoofilia, es el término que se utiliza cuando se dice que lo cuernan

El indulto puede parecer insulto después de gran faena

El cabello en personas mayores a los cuarenta años, se vuelve una especie en peligro de extinción

Cada vez hay menos manuscritos originales de obras de los autores contemporáneos y es que ahora todo lo hacen directo en el computador

Las computadoras de un ciber-café son como las prostitutas, las alquilas por una hora y se dejan que les hagas clic en el mousse

Lo malo de un error es que te diga: Papá


©Alberto Llanes –México-



¡¡Descubra el maravilloso mundo de la Red!!


Estaba alegremente chateando con desconocidos cuando un coño como la catedral de Zaragoza inundó la pantalla, líquida para más INRI. Me quedé mirando el coño, de manera bastante pasiva, sin demasiado entusiasmo, sacándole posibles defectos. Por aquí debería ser algo menos morado, por allá quizá demasiado peludo, etc... De repente apareció una ventanita debajo “Brenda acaba de iniciar sesión”.

- Hola Brenda.- Hola Sélavy ¿Nos conocemos?- No lo sé ¿Sabes si hay algo tuyo en mi pantalla?- Pues no lo sé ¿Podrías darme más detalles?- Es parecido a una rosa.- ¿Podría ser más explícito?- Tiene pelos a los lados.- Tú eres el Sueco ¿No?- ¿Qué sueco?- No me vaciles jajjajaa ¿Qué tal, tío?- Pues aquí, mirando un coño que ha aparecido en la pantalla.- Jajjajajajaja ¿Ya estáis otra vez?- Sí.- Deberías decirle que se corte un poco a la sagrada ¿no?- Verás, es que yo pensé que era tuyo, Brenda.- Ya teeee gustaaaríaaaa, polluelo.- Mira, ahora de repente se ha metido un pepino.- Jajajjajaja. Esa mujer no tiene remedio. Le da igual estar en un ciber que...- ¿Se supone que es mi mujer?- Espere ¿Usted se llama Alfredo?- Pues verá, lo lamento, no. Ya le dije que debía de haber un error.- ¿Quién eres?- Escuche, déjelo, no nos conocemos. Sólo preguntaba si era suyo el coño.- Pues no, mira qué pena.- Pues sí, empezaba a gustarme esto, la verdad.- Pero tengo algo que enseñarte que es mucho mejor.

La conversación se cerró y me quedé parado, esperando. El coño, al rato, desapareció. Poco después abrí una ventana en la que ponía “Brenda y sus juguetitos”. Y ¡sí! ahí estaba Brenda con dos yoyós en cada mano y una pelota de fútbol. Era capaz de dar cien toques con la cabeza mientras emulaba el perrito con los yoyós. Estuve toda la noche presenciando el espectáculo. Tres meses después de aquello, Brenda y yo hablamos por el aparato casi todas las noches, hasta he conocido a El Sueco vía chat, el tipo es capaz de hacer equilibrismos con cinco teléfonos móviles en el aire y a veces, al tiempo, teclea “Hola chicos”.

Selavy –España-

Entre otras Cosas (Recomendación de Libros)


“El cuaderno de Bruno” de Javier Herce

Ya está a la venta El Cuaderno De Bruno, primera novela publicada del autor logroñés Javier Herce. En ella Bruno cuenta su propia historia en primera persona, una historia difícil marcada por la inevitable figura paterna. ¿Cómo le afecta a alguien en su crecimiento que en durante la niñez un padre alcohólico le haya maltratado tanto física como psicológicamente? Bruno vive su infancia encerrado en su propia casa en el pueblo. Nada más conoce aparte de eso, cuatro calles en mitad del monte, pero si quiere acabar con todo deberá huir y enfrentarse a un mundo. Para ello deberá esperar hasta el momento oportuno, ya en la adolescencia. Una vez que es mayor todo aquello no debería afectarle, pero sigue estando ahí y ve que no es fácil. Decide escribirlo todo en un cuaderno a la espera de que alguien lo lea y conozca toda la verdad sobre su vida. Es una historia sincera, basada en sentimientos, una historia de amor, de lucha y, sobre todo, una historia sobre el valor y la soledad.

Javier Herce tiene más proyectos entre manos, pero ahora está centrado en la promoción de El Cuaderno De Bruno a través de su propia Web www.javierherce.tk, donde también se puede comprar la novela y conocer las inquietudes artísticas del autor. Ya hay fecha para la presentación logroñesa de El Cuaderno De Bruno. Será en Santos Ochoa el próximo martes, 28 de febrero y también se está preparando una en Madrid, ya que la publicación, aunque no muy extensa, es a nivel nacional. En Breve habrá más información al respecto

Terquedad acústica (Música)


Auriculares for export (say no more)
Por Fernando Villalba

Desde la malformación de un sonido x, la realidad nos apura en conceptos de destrucción. Como la latente poesía nos lleva al ruido de la parafernalia obtusa, la música juega a ser cultivo de lo incierto.
Me acomodo en un viejo sillón de la casa y recorro uno a uno mis discos, que tan celosamente los acuno en melodramáticos silbidos de medianoche. Mientras viajo por la historia de la música limpiando mis archivos sonoros, no puedo dejar de dilucidar la píldora que mis sentidos captaron.
Esta mañana de lunes sin fecha, prendí la televisión esperando encontrar algún culo de moda o alguna receta de vieja frígida, algún payaso que haga de cantor, o algún cantor que sueña con ser mimo. Pero para sorpresa mía, encontré una entrevista al genial Carlos García Lange, mas popularmente conocido como “Charly García”
En la misma, el genio del rock en habla hispana, comentaba su nuevo posible proyecto. Claro que el que entrevistaba no entendía en absoluto la joya que se le estaba obsequiando. Pero gracias a que él no era el destinatario final, pude apreciar este concepto, único y maravilloso: “música para auriculares”
Veamos: la idea es crear un sonido atmosférico, donde el silencio cumpla su rol fundamental. El publico entrara al espectáculo y se colocará este artefacto. El músico enviara sus notas vía cable, mientras su imagen en forma real conserva la escena. Pero claro, las armonías deben ser compuestas en un orden determinado, donde el receptor no pierda la atención, mucho menos se desvincule de sus sentidos (todo esto es lo que resuelvo mientras el genio prende un cigarrillo y con pocas palabras le dice al periodista que solo va a colocar auriculares)…
No deja de atraerme la idea por muchas razones. Este concepto es nuevo y se nos regalo de forma oportuna. Si hacemos memoria la tragedia ocurrida en Argentina en un recital de callejeros en diciembre de 2004, se dio gracias a que el entendimiento, tanto de los músicos así como del público era equivoco. Hacían de un encuentro entre el alma y el arte un despilfarrado espectáculo. Que hace años viene dejando lo mismo…nada, solo un cúmulo de acordes con alguna letra reivindicando una supuesta “libertad”
Volvamos a García y su proyecto: la mente actúa de puente entre la realidad planteada por espacio y tiempo. La música, es el detonador que abre el cráneo hacia el cosmos. Vale decir que para crear la elipsis, la atmósfera debe ser externa en la comunicación. O más bien crear el santuario acorde a la necesidad del oyente.
Alguna vez, García planteo tocar bajo el agua, y esto también es real a la hora de encontrar los sonidos faltantes. Digo faltantes por que según la metafísica y otras yerbas del saber, hay otros campos sensitivos que acumulan la energía vital. Y como la música no es ajena a otras dimensiones, la idea de crear melodías bajo el agua no es descabellada. Hacer música para auriculares tampoco lo es, pero hasta ahora no fue captada. De alguna forma u otra actuaría como una inyección directa a los sentidos. Y vale hacer una aclaración: tocar y componer música para auriculares, no es lo mismo que escuchar la elaboración ya terminada para ser reproducida en cualquier altavoz. Se trata de una innovación sonora, que abre las puertas a lo nuevo en concepto de composición y apertura musical. Pero para que esto ocurra, la mente se debe adaptar al tiempo, y como ya han dicho algunos: el genio se adelanta a su época. No creo que García sea ajeno a esta matemática concepción.
Viene a mi confundida memoria un tema clave en lo que va a ser la contemplación de lo dicho: “la psicodélica reestructuración” por que no será en vano seguir con antiguas raíces culturales. Y no es por descarte que la trova se vuelva un simple grillo en la ventana. Cabe destacar que la nueva forma de composición va a actuar en diversos campos del absolutismo artístico y creando alrededor de la poesía urgente, la que busca nueva creación, nuevo origen en el decir filosófico. Me refiero a psicodélica reestructuración, a la habilidad que el artista posea para no perder la cordura, bajo los engaños que la nueva vicisitud va a traer como contraindicación pasajera.
Sigo lustrando mis viejos discos y no puedo creer que quede obsoleto el presente. Hasta ahora las tres cuartas partes de la armonía solo habían penetrado en mis oídos de forma pausada y con reformas exteriores. Doy tres vueltas de página a mi oportuna ruptura del saber y observo el reloj, una vocecita en el subconsciente me avisa que debo acostarme, pero sigo resolviendo el crucigrama de la percepción. Hago caso a mi voz y aniquilo a mi razón…“say no more”

Muriendo de Tiempo, ¿Libre? (Avisos y Anuncios de eventos)





Perú
El “Museo de la Nación”
Av. Javier Prado Este 2465 - San Borja. Teléfono: 476-9933 anexo 238
Convoca e Invita

Febrero 2006

JUEVES DE CAFÉ LITERARIO
Recitales y conversatorios. Jueves 2, 9, 16 y 23 de febrero – 7:00 p.m. Auditorio Nº 2. Ingreso Libre

ASOCIACIÓN PROYECTO FOTO PERÚ
Muestra fotográfica que tiene como objetivo fomentar reflexiones acerca de la Identidad Nacional promoviendo lazos interculturales. Organiza: Asociación Proyecto Foto Perú, INC y Museo de la Nación. Del 24 de enero al 19 de febrero de 2006. Sala José Sabogal Galería Sur. Planta Baja. Ingreso Libre


POETICUENTOS PARA NIÑOS.
Cuenta cuentos, poemas y canciones. A cargo de Nory Rojas y Manuel López. Jueves 9, 16 y 23 – 11:00 a.m. Auditorio de Los Niños (Mezzanine). Ingreso: Ticket del Museo



México
Alejandro Neri (trovador), de Gira Universitaria Febrero 2006,

México, D.F: Jueves 2 VOCA 11, 13:00 y 17:00 hrs.
Viernes 3 VOCA 2, 13:00 y 17:00 hrs.
Martes 7 VOCA 7, 13:00 y 17:00 hrs.
Miércoles 8 UPIICSA, 13:00 y 17:00 hrs.
Jueves 9 ESIME Azcapotzalco, 12:00 y 17:00 hrs.
Lunes 13 VOCA 4, 13:00 y 17:00 hrs.
Martes 14 Escuela Nacional de Turismo, 13:00 y 18:00 hrs.
Miércoles 15 Medicina y Homeopatía, 13:00 y 17:00 hrs.
Jueves 16 Plaza Roja UAM Azcapotzalco, 13:00 hrs.
Jueves 16 Esc. Sup. Economía, 16:00 hrs.
Viernes17 ESIME Zacatenco, 13:00 y 18:00 hrs.
Martes 21 Nacional de Maestros, 12:00 hrs.
Miércoles 22 Química C.U. 12:00 y 17:00 hrs.
Jueves 23 Nacional de Maestros, 12:00 hrs.
Viernes 24 Veterinaria y Zootecnia C.U. 13:00 y 17.00 hrs.
Lunes 27 VOCA 10, 13:00 y 17:00 hrs.
Venta de discos y demos en los conciertos

Más información y contacto: http://www.alejandroneri.com.mx

Masoquismos (Convocatorias)



México
Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino 2006


Convocan El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el Gobierno de Jalisco a través del Programa Cultural Tierra Adentro y de la Dirección General de Vinculación Cultural, y de la Dirección de Literatura de la Secretaría de Cultura de Jalisco, respectivamente, así como el H. Ayuntamiento Constitucional de Cocula.Podrán participar las y los poetas mexicanos por nacimiento que residan en el país, de hasta treinta años cumplidos al cierre de la convocatoria, que envíen un volumen de poemas inédito, en español, con tema y forma libres, con una extensión mínima de 50 (cincuenta) cuartillas y una máxima de 80 (ochenta). Quedan excluidos de esta convocatoria: trabajos que se encuentren participando en otros concursos en espera de dictamen; obras que hayan sido premiadas en otro certamen; las autoras y los autores que hayan recibido este Premio en emisiones anteriores, y el personal de las Direcciones convocantes del CONACULTA, así como de la Secretaría de Cultura de Jalisco y el H. Ayuntamiento de Cocula, Jalisco.Los trabajos deberán ser enviados a:Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino 2006Ex convento del CarmenAv. Juárez No. 638, Zona Centro,C. P. 44100, Guadalajara, Jalisco.La presente convocatoria estará vigente desde el momento de su publicación hasta el 31 de marzo de 2006. En el caso de los trabajos remitidos por correo o mensajería, se aceptarán aquellos cuya fecha de envío no exceda la del límite de la convocatoria.Premio único e indivisible de $ 100,000.00 (cien mil pesos 00/100 m.n.) en efectivo y diploma, así como la publicación del libro en el Fondo Editorial Tierra Adentro.Las bases completas las encontrarás aquí: http://www.conaculta.gob.mx/convocatorias/


I Premio Internacional de Novela Negra Ciudad de Carmona (España)

El Ayuntamiento de la ciudad de Carmona y la editorial Almuzara, en su interés mutuo por estimular la creación literaria dentro del género negro y fomentar su lectura, convocan al "I PREMIO INTERNACIONAL DE NOVELA NEGRA CIUDAD DE CARMONA "
BASES:

Podrán participar en este premio autores de cualquier nacionalidad con novelas de género negro, originales e inéditas, escritas en lengua española, que no hayan sido premiadas anteriormente en ningún otro concurso ni tengan comprometidos sus derechos.

Las obras deberán ser enviadas por correo postal certificado, o mediante agencias de mensajería, poniendo en el sobre la mención "I PREMIO INTERNACIONAL DE NOVELA NEGRA CIUDAD DE CARMONA", a la dirección siguiente:

Editorial Almuzara C/ Imprenta de la Alborada, 245 Naves C-D Polígono Industrial Las Quemadas Córdoba 14014 España

El plazo de admisión de originales queda abierto el día 15 de noviembre de 2005 con la publicación de estas bases y finalizará el día 15 de febrero de 2006 a las 12 horas.

El Premio consistirá en una dotación de 12 000 (doce mil) euros a los que se les aplicará la retención fiscal establecida por la legislación española, y en la edición de la obra ganadora en la colección Tapa Negra de la editorial Almuzara.

El jurado emitirá su fallo el día 1 de abril de 2006, pero este no se divulgará hasta el 3 de mayo de 2006 en un acto público que se celebrará en la ciudad de Carmona y en el que se presentará la edición de la novela premiada, contado con la presencia de su autor a quien se invitará.

La editorial Almuzara se reserva el derecho de negociar con los autores no premiados la posible publicación de sus obras en su colección Tapa Negra.

Más información: http://www.carmona.org/y http://www.editorialalmuzara.com/.
Bases Completas:
http://www.carmona.org/agenda/adjuntos/procedimiento/20051115_000138.pdf
http://www.editorialalmuzara.com/catalog/images/bases_premio_carmona.pdf
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